La importancia de la Etnografía en la Edad Contemporánea radica en que evidencia los elementos que configuran las culturas ancestrales: su cosmovisión, sus ritos, la relación personal entre los miembros que la integran, y las reacciones de extrañeza ante los foráneos que arriban a Tierras Sagradas para construir determinadas teorías de estudio in situ.
Fenómenos de colonización como aquel registrado a mediados del siglo XX que, con la llegada de los misioneros, modificaron y adaptaron, parcialmente determinados aspectos culturales como; por ejemplo, delimitar la cosmovisión occidental de la ancestral, pues conservan en su imaginario tanto, el nombre de la divinidad máxima de Arutam como el nombre de Yahvéh, como deidades únicas y hacedoras del mundo.
Entre los estudios etnográficos se destaca la aproximación lingüística del idioma achuar, hablada por la nacionalidad del mismo nombre. Se ubica geográficamente en las provincias de Pastaza y Morona Santiago. La lengua es articulada por los miembros de la comunidad en la que se ha determinado como muestra de análisis etnolingüístico de un universo aproximado de 30 comunidades con 250 habitantes cada una.
El Achuar es una lengua que, paulatinamente, desaparece por los fenómenos del mestizaje y la aculturación, pues las comunidades cuentan con beneficios de exoneración del transporte aéreo para las distintas actividades en las ciudades: adquirir los productos alimenticios de manufacturación industrial, comprar vestimenta, realizar trámites burocráticos concernientes a la comunidad, etc.
De esta manera, los integrantes de las comunidades nativas mantienen contacto con la población mestiza a través de los distintos medios de transporte y de dispositivos tecnológicos para la comunicación dentro de un mundo de globalización cultural.
af